“Durante la pandemia de COVID-19, los países con liderazgo femenino han sufrido seis veces menos muertes confirmadas que los países liderados por hombres”.
Un dato encontrado por casualidad, y muy acertado para reflexionar al respecto. ¿Cuáles son los fundamentos necesarios del liderazgo del futuro y del presente? Os quiero hablar de liderazgo femenino en honor a todas las mujeres líderes visibles que son ejemplos que debemos seguir, y que han demostrado que necesitamos un liderazgo más pragmático y meritocrático para hacer frente al nuevo entorno con éxito.
Avivah Wittenberg-Cox , directora ejecutiva de 20-first, una de las firmas de consultoría de género líderes en el mundo, en un seminario de la HBR destaca los cambios que se están produciendo en este momento:
- Una nueva narrativa general de cómo es un líder fuerte.
- Priorización de un nuevo conjunto de cualidades críticas de liderazgo como la honestidad, la modestia y la inteligencia.
- Mujeres líderes visibles que sirven como poderosos modelos a seguir.
No puedo estar más de acuerdo en la necesidad de nueva narrativa de cómo ser un líder fuerte y, además, no teniendo en cuenta el género.
Por eso, el entender que el liderazgo femenino es un liderazgo necesario, sin ser exclusivo de mujeres es clave. No debe volver a caer la dicotomía de la visión estereotipada de la sociedad en función del sexo. No debe conducir a expectativas erróneas de lo que representa.
El liderazgo femenino tiene que ver con liderar desde tu esencia, tus valores, tus principios, tus inquietudes, tus deseos…. Sin miedos, sin etiquetas, sin barreras. Teniendo el control de tu propio LIDERAZGO.
El liderazgo femenino empieza por liderarte a ti mismo, ser congruente con tus palabras y actos, respetar y defender tus propias decisiones, aprender a quererte con virtudes y defectos. Y sobre todo seguirte a ti mismo.
Características del liderazgo femenino y su necesidad
La realidad es que diversas investigaciones concluyen que las mujeres tendemos a ejercer el liderazgo de una forma diferente a la mayoría de los hombres y que se refleja en una serie de características.
En este punto, me gustaría abrir un paréntesis, ya que hay otros estudios o investigaciones que apuntan que los resultados de estas investigaciones no son concluyentes, porque la muestra no es suficiente, porque los buenos resultados son debido a factores combinados o por un tema cultural.
No importa, la realidad es que hay muchas mujeres líderes que triunfan liderando desde las características atribuidas al liderazgo femenino en estas investigaciones y que lo demuestran día a día, por lo tanto, eso es irrefutable.
Estas características son:
- Más orientación a personas, lo que ayuda a generar compromiso.
- Más creatividad, ver diferentes soluciones para el mismo reto.
- Más flexibilidad, capacidad de pensar y actuar en múltiples direcciones o temas al mismo tiempo.
- Más cooperación, lo que lleva a trabajar en equipo de forma más natural.
- Más inclusividad, alentando la participación y compartiendo el poder y la información.
- Más empatía, dominio de la inteligencia emocional que ayuda en la conectividad de las personas.
Bien, no se me ocurren habilidades más necesarias en los lideres del futuro que las enumeradas para afrontar con éxito el desafío de transformación del entorno en el que estamos viviendo. Entorno tildado “Bani” por los expertos y que se caracteriza por:
- Fragilidad (B): los negocios, proyectos, procesos son más vulnerables de lo que aparentan.
- Ansiedad (A): Tiempos de incertidumbre extrema que generan ansiedad en las personas que intentan dar respuestas a problemas del futuro.
- No lineal (N): Después del 2 no siempre va el 3.
- Incomprensible (I): muchas de las cosas que pasan se escapan de nuestro entender.
Es este escenario, lo que se necesitan son líderes que creen equipos, flexibles, ágiles, conectados, participativos, resilientes, comprometidos y que den respuestas creativas a los diferentes retos que se le plantean. Características como he dicho atribuidas al liderazgo femenino.
Doy fe de que el liderazgo femenino no tiene sexo.
He tenido el enorme placer de conocer a centenares de personas que trabajan para liderarse a sí mismos, a sus proyectos y a sus equipos, en su día a día. Trabajan para hacer frente a este nuevo entorno dando la respuesta más eficiente como líderes.
Creedme si os digo que no tiene nada que ver con el sexo de la persona, sino con la implicación, las ganas de seguir aprendiendo, la pasión por lo que hacen, la honestidad que demuestran y su humildad. Gracias a todos y todas esas líderes que me han permito compartir con ellos un trocito de su andadura y me han mostrado el camino.
¡Si quieres tener éxito y ser un líder de futuro y de presente, lidera en femenino! ¿comenzamos?