El Segmento Senior será uno de los más importantes en el futuro
La ONU estima que en 2050 habrá 2.000 millones de personas mayores, lo que conlleva que el 22% de los habitantes del planeta será mayor de 70 años. Esta realidad supone grandes retos en los negocios, planteando soluciones a las demandas sociales de los consumidores y a la nueva sociedad en la que confluyen digitalización, envejecimiento y post pandemia.
Este cambio de paradigma provoca que todos los sectores se adelanten, analicen y exploren las oportunidades de negocio que nos trae la Silver Economy, entendida como aquella actividad económica específica, orientada a atender las necesidades y motivaciones de los seniors y su entorno.
Las oportunidades de la economía plateada
La economía plateada (en honor a las canas) es una economía de oportunidades. Su objetivo es aglutinar una visión de las personas mayores como consumidores y productores que demandan bienes y servicios específicos. En España, según datos extraídos de la Organización Mundial de la Salud, el impacto económico de la riqueza de las personas mayores se traduce en un 26% del PIB y en un 60% del consumo nacional. Estos datos conllevan a tener que buscar nuevos productos y servicios adaptados a las necesidades de los mayores, apoyándose en el área de la gerontología y animando a la inversión en soluciones que mejoren la atención sanitaria y la independencia de los senior.
Implicaciones de la Silver Economy en las organizaciones
La Silver Economy, nos lleva a posicionarnos ante dos situaciones:
- Caer en un pesimismo social, sin hacer cambios y dejando que todo quede igual.
- Posicionarnos como nuevos buscadores de oportunidades económica y sociales.
Ante este contexto, las empresas deben evitar caer en el pesimismo social y empezar a contemplar al perfil senior entre uno de sus grupos de interés prioritarios dentro de sus estrategias empresariales y de comunicación. Es el grupo de población donde mayor renta neta media hay por persona, y el que cada año crece más dentro de la pirámide poblacional, dando así, la bienvenida a una era dorada donde la Silver Economy será el factor clave de sostenibilidad, beneficio social y beneficio económico.
La comunidad senior, es mucho más racional y menos impulsiva, por lo que el approach de comunicación corporativa y marketing debe de hacerse de forma diferente. Es un público objetivo, que se preocupa mucho por el estilo de vida y el bienestar, así como por temas de ocio y turismo. Pero, no podemos pensar en el público senior como una única comunidad, sino que se deben tener en cuenta su renta, su estilo de vida y sus hábitos de consumo.
Los formatos también son importantes: cómo se les transmiten los mensajes de una forma más clara y sencilla, de forma que generen confianza y cercanía. Un claro ejemplo de evolución es el marketing de influencia, que ha sabido detectar esta oportunidad y ya es habitual que las marcas cuenten con perfiles más seniors dentro de sus estrategias. O casos como el de la transformación digital de la banca, que está generando controversia por la exclusión financiera de los mayores, y ponen de manifiesto que las compañías deben, no solo adaptar su estrategia de negocio para dar respuesta a las necesidades de este perfil, sino que deben tener en cuenta que pasamos de un perfil comprador transaccional a un comprador relacional, para el cual es importante el trato de la empresa y del comercial, más que del producto en sí. Le gusta sentirse escuchado, aconsejado por un experto, y tener una persona en la que pueda depositar su confianza.
En definitiva, la revolución demográfica y la Silver Economy impactan de lleno en las organizaciones. Obtener un buen estudio de mercado de los clientes, definir y diseñar bien los modelos de negocio para adaptarlos a esta economía, y desarrollar productos y servicios relacionados con la Silver Economy será clave para que las organizaciones sobrevivan y saquen partido del contexto sociodemográfico.