Las palabras transformación digital y digitalización son conceptos que se suelen utilizar cómo sinónimos cuando no lo son. Entonces… ¿Qué es la digitalización? Es un proceso aislado que se da en diferentes partes de una empresa enfocándose en la tecnología, mientras que la transformación digital abarca a la empresa en su conjunto agregando valor al usuario final.
La transformación digital ya no se trata de una moda, sino que es una parte esencial de nuestros negocios en un entorno económico de constante cambio, con el que poder mantener la competitividad de la empresa y permitir generar nuevas oportunidades significativas de crecimiento. Por lo que el impacto va a ser tanto organizacional como individual.
Un estudio realizado por ManpowerGroup , resalta que las empresas que más se esforzaron en transformarse digitalmente son las que actualmente están manteniendo la mayor parte de su plantilla. Según el mencionado estudio, en respuesta a la pandemia del COVID-19 el 38% de las compañías tomó el camino de la transformación digital, de ellas, un 86% ha mantenido a toda su plantilla y han conseguido generar más empleo. En los próximos años, según el informe IDC FutureScape: Worldwide Digital Transformation 2022 Predictions, se prevé que las inversiones directas en transformación digital se acelerarán a una tasa de crecimiento anual del 16,5% hasta 2024, suponiendo el 55% de todas las inversiones en tecnología y transformación. Por lo que las empresas que no afronten este cambio tenderán a desaparecer, debido a que no dispondrán de los recursos para seguir el ritmo de las demás empresas.
Esto nos lleva a hacernos la siguiente pregunta ¿Qué deben hacer las empresas para estar preparadas en un entorno de cambio constante?
Las 4 palancas indispensables para afrontar el cambio
Lo primero que se debe tener en cuenta es que va a ser necesario una reforma humana y de dirección estratégica. Con este gran cambio conseguiremos acelerar los procesos, competencias y oportunidades tecnológicas que nos permitirán tener un impacto estratégico y prioritario.
¿A qué nos referimos con tener un impacto estratégico y prioritario?
- Herramientas actualizadas: Las empresas que sigan utilizando sistemas antiguos o heredados no van a poder seguir el ritmo. Las nuevas herramientas digitales permiten a los trabajadores adaptarse más rápido, dándoles la oportunidad de mantenerse siempre al frente de la competencia. Gracias a esto, se agiliza la comunicación, mejora el trabajo en equipo y permite una adaptación más flexible a las condiciones cambiantes del mercado.
- Favorece a la innovación: La transformación digital y la innovación trabajan conjuntamente para llevar con éxito el cambio. Este proceso trata de un conjunto de ideas, interacciones y prototipos, con los que se podrá experimentar, con el fin de desbloquear el modelo de negocio adecuado para tu organización, creando un continuo proceso de cambio con el que poder adaptarte a las necesidades del mercado.
- Aumento de la productividad y eficiencia: Procesos que anteriormente se hacían manualmente, hoy apenas nos quitan tiempo debido a la evolución de la tecnología. Podemos afirmar que los trabajadores tienen más tiempo para concentrarse en trabajos estratégicos.El tiempo es un factor clave, es por eso por lo que sistematizar tareas con programas informáticos nos va a permitir aumentar la calidad de nuestro trabajo, aportando valor a la compañía con análisis más sistemáticos, lógicos y racionales.
- Rapidez y calidad de la información: Mediante la transformación digital las empresas van a poder recabar una gran cantidad de datos en relación con el negocio, clientes y sector. Así, los individuos van a poder tener toda la información disponible, mejorando exponencialmente la toma de decisiones, teniendo en cuenta que las herramientas tecnológicas crecen a la vez que el negocio se expande.
Por eso es importante que no se cumplan una serie de errores a la hora de afrontar esta compleja transición, ya que podríamos poner en riesgo a toda la organización.
Errores más comunes que evitar en el proceso
Después de la pandemia ocasionada por el Covid-19, se volvió algo popular escuchar a los empresarios hablar sobre la importancia de la transformación digital en las organizaciones. Sin embargo, muchos lo tomaron como si fuese el desarrollo de una aplicación y pocos entendieron que no solo se trataba de un producto.
Este proceso debe centrarse en cumplir los objetivos del negocio, para así poder encontrar el “por qué” de la transformación digital irá a reducir la fricción, mejorar la experiencia de cliente y elevar la rentabilidad. ¿Qué errores no se deben cometer?
- Lo primero que debe hacer una empresa cuando se lanza a la transformación digital, es especificar unas metas claras, definiendo unos objetivos claros, precisos y cuantificables.
- Es imprescindible involucrar a las personas, necesitamos tener en cuenta que existe una resistencia natural al cambio. Se suele tener miedo a que no funcione, a gastar más de lo presupuestado o incluso a perder el trabajo. Actúa para crecer y cambiar la mentalidad de tus empleados. Este es un proceso que tienen que ver con el cambio de herramientas y procesos junto con el crecimiento de las personas.
- Es necesario tener unas métricas claras que nos permitan ver si se están cumpliendo los objetivos esperados, para así poder asegurar el éxito del proyecto.
- Es importante tener claro que esté proceso de transformación digital es lento y gradual, por lo que nunca se debe abordar todo a la vez. Identifica áreas sencillas de mejora, para llegar con paciencia a generar una auténtica revolución digital.
En estos últimos años, las empresas han dado un giro radical y se han dado cuenta de la importancia de las herramientas digitales. Es por eso, por lo que si no quieres estar entre las empresas que desaparecen por no digitalizarse debes seguir los pasos anteriores, teniendo en cuenta que se trata de un proceso gradual y lento. Los datos respaldan y enfatizan que el futuro pasa por la era digital y por lo tanto la constante adaptación a los nuevos procesos tecnológicos. ¿Quieres saber más?