Las empresas digitales son el presente, incluyendo a la Pyme. Atrás queda el “no poder permitirse invertir en digitalización”; en 2022 este tipo de excusas se quedan atrás. Y no digo poco.
Y es que, además de disponer de tecnología freemium o a precios muy razonables para digitalizar interna y externamente nuestro negocio dentro de nuestro plan de transformación digital, podemos (y debemos) invertir en cultura digital, para lo cual no hay excusas. Recuerda que las empresas digitales van más allá; necesitamos personas que desarrollen pensamiento digital y que sepan explotar la tecnología a su disposición en su beneficio.
Pero ahora que se ha cerrado el año 2021 con una exigencia digital para las Pymes “in crescendo” a la velocidad de un meteorito imparable, en 2022 parece que ese meteorito no solo no se va a estrellar, sino que adquirirá más velocidad. En este sentido, como Pymes ¿en qué nos debemos centrar? Estos son los temas que van a impactar:
- Hibridación
- Automatización
- Ciberseguridad
- Datos
- Omnicanalidad
Tendencias para las empresas digitales
Hibridación
El pasado año la mayoría de las empresas han invertido parte de sus recursos en definir el modelo de trabajo que mejor se adapte a su modelo de negocio, empleados, clientes, proveedores y stakeholders implicados con una máxima: cero impacto en el nivel de productividad, atención y servicio.
Y el resultado parece ser un futuro (o al menos, un 2022) en el que la mayoría de los puestos de trabajo pasará por modelos híbridos en los que los empleados trabajarán algunos días desde sus hogares y otros desde la oficina; con diferentes planteamientos, pero híbridos.
Sin embargo, las pequeñas y medianas, deberán acelerar el proceso de digitalización si quieren ser empresas digitales con éxito ampliando la inversión en nuevas plataformas de colaboración e iniciativas capaces de crear experiencias conectadas. Y es que ahora todas las herramientas digitales disponibles han adquirido un nivel de desarrollo que les ha confiado el nivel de madurez adecuado para atender a las necesidades de las organizaciones; si no fuese así, el teletrabajo durante la pandemia no hubiese sido un éxito.
Automatización
Mejor dicho, hiper automatización. Y es que esta tendencia marcará la diferencia entre el éxito y el fracaso de las empresas digitales. El objetivo es incrementar la productividad, transformar la experiencia de los empleados y clientes y acelerar el lanzamiento de productos y servicios en 2022. Pero ¿qué es lo que podemos automatizar en una Pyme? Todo, interna y externamente.
Y en este sentido, la tendencia es hacia la implementación y desarrollo de la inteligencia artificial porque permite, entre otros aspectos:
- Mejorar la retención y contratación. A través de la búsqueda de currículums, programar entrevistas, contactar a los solicitantes…
- Agilizar el marketing. Por ejemplo, una plataforma de email marketing puede seleccionar los mejores tiempos de envío, ajustar las personalizaciones, automatizar el contenido…
- Mejorar la experiencia de cliente al convertirse en un apoyo a la atención al cliente 24/7/365 proporcionando respuestas instantáneas.
- Incrementar las ventas al iniciar conversaciones de manera proactiva con visitantes de un sitio web según los criterios de orientación.
Por tanto, el negocio de cualquier Pyme no es demasiado pequeño para la IA y el aprendizaje automático. La información errónea o el miedo no pueden convertirse en obstáculos para investigar cómo beneficiarse de estas tecnologías.
Ciberseguridad
Como Pymes no podemos pensar que estamos exentos de sufrir ataques como el ransomware o “secuestro de datos” (que ha batido records en 2021): es más, debemos estar preparados para este y otro tipo de ciber ataques como pueden ser:
- “Fake News” y campañas de desinformación: la difusión de información falsa se seguirá aprovechando para ejecutar ataques de phishing.
- Filtraciones de datos: con mayor frecuencia y a mayor escala y una recuperación más costosa.
- Más ataques a los dispositivos móviles: los ciberdelincuentes evolucionarán y adaptarán sus técnicas para explotar la dependencia de los smartphones.
- Phising o suplantación de identidad: clickbait, respuesta urgente, contacto personalizado, esconderse en lo rutinario, hacerse pasar por un conocido…
Por tanto, como Pyme, debemos poner en marcha procesos internos (políticas de seguridad propias) con los que mejorar nuestra ciberseguridad. Estos procesos tratan los aspectos y elementos esenciales donde debemos aplicar seguridad y que deben estar bajo control.
Desde el INCIBE, Instituto Nacional de Ciberseguridad, se ponen a disposición de los usuarios, y de manera gratuita, un total de 32 políticas de ciberseguridad clasificadas para el empresario, su equipo técnico y sus empleados.
Por tanto, la seguridad seguirá siendo una necesidad: la preocupación en este sentido siempre ha sido un obstáculo en cualquier iniciativa digital de modo que es hora de ponernos manos a la obra.
Datos
Estamos asistiendo a una auténtica revolución de los datos con el cada vez mayor volumen de información que recopilan las empresas digitales. Y las Pymes no deberían ser menos en este sentido: a medida que su nivel de digitalización se incrementa, ese volumen crece y crece y crece… Y esto es buena noticia. Sin embargo, las pequeñas y medianas empresas deben dar un paso más y deben trabajar por integrar, analizar y actuar sobre estos datos, lo que constituye un gran reto. Esto se traduce en inversión en herramientas de Smart Data que permitan desarrollar un uso inteligente de los datos obtenidos; ya no prima la cantidad, sino la calidad del dato, ya que no todos los datos aportan el mismo valor.
Triunfar en 2022 implica que las pequeñas y medianas empresas digitales deban deshacer los silos de datos para unificar la fuente de información con el fin de alcanzar una única fuente integrada que facilite los procesos internos y externos. Sólo entonces podrán dar sentido a todos sus datos y mejorar la toma de decisiones.
Omnicanalidad
Todos sabemos que la omnicanalidad es la estrategia de integración de todos los canales (distribución, promoción y comunicación) que cualquier negocio pone a disposición del cliente al situarle en el centro de su actividad, con la única finalidad de ofrecerle una experiencia homogénea y satisfactoria. Es decir, la omnicanalidad permite adaptarse al estilo de vida de sus clientes en un entorno en el que él es el que decide cómo, cuándo y dónde comprar. Y este concepto también afecta a cualquier Pyme si busca formar parte de las empresas digitales.
Dicho esto, ¿por qué todavía los clientes seguimos “disfrutando” de experiencias multicanales y no omnicanales? Estoy segura de que 2022 será el año en que este hecho cambie. Te cuento los motivos en detalle para disipar dudas:
- Es la oportunidad ideal para ofrecer una experiencia extraordinaria al cliente, aumentar su lealtad y fidelización e impulsar el posicionamiento de la empresa y de la marca en el mercado.
- Permite optimizar todos los canales de interacción de los clientes, por lo que es posible realizar compras por cualquiera de ellos y esto implica ,directamente, un aumento de las ventas.
- Además, permite identificar las preferencias de los clientes y generar medicionesintegrales para obtener datos precisos sobre su comportamiento para comunicarnos con él en los momentos oportunos en el customer journey.
Por tanto, apostar por una estrategia omnicanal en nuestra Pyme en 2022 es apostar al caballo ganador al mejorar la propuesta de valor a nuestros clientes; no será sencillo y requiere inversión en tecnología y recursos, pero no podemos correr el riesgo otro año más. Recuerda por tanto las tendencias en 2022 en lo que a digitalización de Pymes se refiere: hibridación, automatización, ciberseguridad, datos y omnicanalidad. Si conseguimos evolucionar en todas y cada una de estas estrategias, no habrá quién nos frene.